En su carta a Éfeso, el apóstol Pablo advirtió a quienes fueron llamados a ser embajadores de Dios que caminasen de manera adecuada a la vida de un misionero cristiano. Dijo: “Por eso yo, que estoy preso por la causa del Señor, les ruego que vivan de una manera digna del llamamiento que han recibido” (Efe. 4:1).
Pablo creía que debía caminar, vivir y trabajar dentro de los principios que el Salvador había enseñado a través de su vida ejemplar. Nosotros también, como ministros del evangelio a través de la página impresa, somos llamados a cumplir la misma comisión a la que Pablo respondió, y debemos adherirnos completamente a esos preceptos. Nota cómo Pablo enfatiza los cuatro elementos clave para cumplir la misión: caminar en unidad, amor, sabiduría y luz.
Caminar en UNIDAD
La unidad entre los mensajeros de Dios es esencial y esperada. Todos estamos involucrados en la misma misión, llevamos el mismo mensaje y compartimos la misma esperanza en Cristo Jesús. Pablo nos aconsejó caminar “siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor. Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz” (Efe. 4:2, 3).
Caminar en AMOR
Los colportores (CEs) fuimos llamados en amor; nuestros corazones respondieron en amor, y debemos caminar en amor, al trabajar juntos. Sería bueno hacernos la siguiente pregunta luego de cada presentación: “¿Sintieron mis oyentes el amor de Jesús durante mi presentación?” Las Escrituras nos recuerdan: “Por tanto, imiten a Dios, como hijos muy amados, y lleven una vida de amor, así como Cristo nos amó y se entregó por nosotros como ofrenda y sacri cio fragante para Dios” (Efe. 5:1, 2).
Caminar en SABIDURÍA
Pablo también escribió: “Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos” (Efe. 5:15, 16).
El conocimiento y la sabiduría no son lo mismo. Podemos adquirir conocimiento de libros, estudios o multimedia; pero la sabiduría viene de la Palabra de Dios y de la presencia del Espíritu Santo. Quisiera animar a todo CE a abrir su corazón a Dios cada día, para llenarse de la sabiduría del Espíritu Santo.
Caminar en LUZ
“Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz” (Efe. 5:8). Los colportores son mensajeros de esperanza y embajadores de la verdad. Tu caminar con Dios es una luz para otros. Ojalá todos, los cincuenta mil CEs, se unan al apóstol Pablo para caminar rme y elmente. Camina en unidad, en amor, en sabiduría y en luz.
Camina siendo digno de tu llamado, y serás una gran bendición para un mundo necesitado.