Iluminando la comunidad

Iluminando la comunidad

Es innegable que los Grupos pequeños han prestado una valiosísima contribución al crecimiento de la iglesia en todo el mundo. Esta estructura favorece la participación de un pequeño núcleo de personas que, conectadas, desarrollan relaciones saludables. En ellos, la gente tiene mayor disposición para desarrollar las competencias necesarias a fin de hacer felices a los demás.

Además de esto, en esta estructura estas personas desean cumplir la comisión encomendada por Cristo, que es, en esencia, la conquista de discípulos para el Reino de Dios (Mat. 28:19). Cuando esos discípulos deciden bendecir a la comunidad, el lugar en que están reunidos se transforma en un espacio de luz.

Durante su ministerio terrenal, Jesús entrenó a doce hombres. Aunque eran diferentes en sus personalidades, fueron usados por el Espíritu Santo con el fin de realizar muchas cosas para Dios. Fue a partir de un pequeño grupo de personas humildes que Cristo fundó su iglesia.

DIRECTRICES MISIONERAS

Elena de White escribió: “Solo el método de Cristo será el que dará éxito para llegar a la gente. El Salvador trataba con los hombres como quien deseaba hacerles bien. Les mostraba simpatía, atendía sus necesidades y se ganaba su confianza. Entonces les decía: ‘Seguidme’ ” (El ministerio de curación, p. 102). En la parábola del Buen Samaritano (Luc. 10:25-35), podemos ver en la práctica la declaración de Elena de White, y su aplicación para las acciones de los Grupos pequeños en la comunidad.

Por medio de proyectos misioneros, los Grupos pequeños pueden vivir la historia del Buen Samaritano de acuerdo con lo narrado por Jesús. La trama de esta parábola establece directrices que deben orientar la práctica misionera de la iglesia junto a las comunidades.

El buen samaritano adoptó varias actitudes importantes:

1. Vio al sufriente. Debemos pedir a Dios que nos dé una clara visión para ver a los necesitados.

2. Permitió que la compasión lo moviera a la acción.

3. Se aproximó al moribundo, tocándolo.

4. Ungió con aceite al herido. En los tiempos bíblicos, el aceite actuaba como emoliente para las heridas.

5. Derramó vino sobre las heridas. El producto de la vid tiene propiedades antisépticas capaces de desinfectar partes del cuerpo contra bacterias y organismos extraños.

6. Salió de la reflexión y se extendió hacia la acción, salvando al hombre.

7. Finalmente, entregó una cantidad de dinero al dueño del hospedaje; una provisión para los gastos que la recuperación del doliente iba a demandar.

Cristo desea que, de forma voluntaria, hagamos provisión para la salvación de nuestro prójimo, por medio de la donación de nuestros recursos, tiempo, dones y talentos, y si fuera necesario, de nuestra propia vida. Las acciones solidarias abren las puertas del corazón para recibir las verdades eternas que traen salvación.

Juan de la Cruz, un fraile del siglo XVI, afirmó: “Misión es llevar amor donde no hay amor”. Estas palabras deben transformarse en realidad en el círculo relacional de los Grupos pequeños. De hecho, para que la misión alcance su objetivo final, es necesario que vivamos en la práctica lo que predicamos.

REINO DE SACERDOTES

Cada miembro de la iglesia desempeña su sacerdocio al participar de la proclamación del evangelio eterno con los talentos que recibió del Señor. Cuando los israelitas, perseguidos por los ejércitos del faraón, llegaron frente al mar Rojo, el Señor pidió que Moisés, líder del pueblo, usara su cayado. Por medio de este, Dios operó con su gran poder para abrir las impetuosas aguas del mar.

En estos últimos días, Dios convoca a los miembros de la iglesia para dedicar lo que recibieron del Señor, es decir, sus talentos y dones. Llama a niños, jóvenes, adultos y ancianos dispuestos, y que no amen la vida más que la salvación de quienes están pereciendo en las garras del pecado. Este llamado exige renuncia. Muchas veces, tendremos que hacer sacrificios colectivos y personales para distribuir las nuevas de salvación entre los amigos de nuestra comunidad. Dios desea usar a la iglesia para abrir el mar de las inseguridades y los temores, a fin de operar la liberación de millares de personas de la esclavitud del pecado, llevando esperanza a la gente en su comunidad. Un ministerio lleno de poder está a disposición de todo aquel que atienda a esta convocatoria divina. “Debe animarse a hombres que no han sido llamados al ministerio evangélico a que trabajen para el Maestro, de acuerdo con sus diversos talentos” (El ministerio de la bondad, p. 114).

Querido anciano, ¿has imaginado lo que una comunidad de creyentes, beneficiada con los dones y los talentos otorgados por el Espíritu Santo, puede realizar en la sociedad en que se encuentra? ¿Pensaste en qué sucedería si el médico, el enfermero, el mecánico, el profesor, el panadero o el dentista dedicasen algunas horas durante la semana para hacer feliz a alguien de su comunidad? Haríamos más contactos amistosos, conquistaríamos la confianza de más personas, e innumerables puertas serían abiertas para que nuestros amigos conozcan el Reino de Dios. Elena de White escribió: “La obra de Dios en esta Tierra nunca podrá ser terminada hasta que los hombres y las mujeres que constituyen la feligresía de nuestra iglesia se alisten para trabajar y unan sus esfuerzos con los de los ministros y los oficiales de la iglesia. […] Puede haber abogados cristianos, médicos cristianos, comerciantes cristianos. Cristo puede ser representado en todas las profesiones legítimas” (ibíd., p. 116).

ESTRATEGIAS

Cristo inició su obra en Galilea, en una región específica. En este lugar, dedicó tiempo y energía con la intención de bendecir a todos los que se acercaban a él. Durante su ministerio, Cristo desarrolló y enseñó métodos para emprender esfuerzos a fin de ministrar a aquellos que están lejos de Dios y necesitan de nuestro toque de compasión. El propio nombre Emanuel, dado a Cristo, tiene un significado para la evangelización: “Dios con nosotros” (Mat. 1:23). Evoca proximidad, empatía; es relacional. Por amor a la humanidad, el Salvador se revistió de la naturaleza humana, sintiendo los dolores y enfrentando los dilemas que las personas experimentan.

La acción de los Grupos pequeños necesita seguir el mismo principio, es decir, debe ser elegida una zona. Los vecinos deben ser impactados con actos de compasión y relaciones transformadoras. Podemos decir que el estilo de vida de un Grupo pequeño debe ser misional. Todos sus integrantes necesitan tener el sentido de misión, expresado por medio de actitudes relacionales e intencionales.

Existen Grupos pequeños que tienen como objetivo atender a grupos específicos de personas. Son llamados Grupos pequeños de ayuda. Atienden a drogo dependientes, carenciados, madres y padres solteros, divorciados, embarazadas, etc.

En caso de que tu Grupo pequeño no tenga un formato para atender a un tipo especial de necesidad, sigue algunos pasos para la realización de acciones de compasión en favor de la comunidad.

1. Para que las acciones del Grupo pequeño sean realizadas de manera satisfactoria, se hace necesario obtener una visión de las principales necesidades o carencias (desempleo, alimentación, abrigo, vivienda, salud, educación, seguridad, ocio) de las personas que residen en esa área geográfica. Esto es fundamental para la elaboración de una planificación de actividades y proyectos del Grupo pequeño.

2. Descubre cuáles son los proyectos que más se identifican con la mayoría de los componentes del Grupo pequeño.

3. No esperes que los recursos para la realización de los proyectos vengan de la iglesia; lo ideal es que sean donados, de forma compartida, por los componentes del Grupo pequeño. Eso los llevará a sentir la situación de las personas a quienes desean ayudar.

4. Los proyectos muy demorados no Rev. Anciano / Iglesia en acción‹ son eficaces, pues cansan a los componentes del Grupo pequeño. Lo ideal es que tales acciones duren, como máximo, dos horas y media.

5. Es importante que cada cuatro o seis semanas el Grupo pequeño realice alguna acción en favor de la comunidad.

6. Si eres el líder, no te preocupes por los posibles errores en la ejecución del proyecto; son señal de que algo se está realizado. La práctica traerá los aciertos.

7. Se recomienda que cada componente del Grupo pequeño tenga la oportunidad de ministrar a la comunidad. Cada seguidor de Cristo debe ejercer su propio sacerdocio.

8. Es necesario que la distribución de las tareas siga el criterio de afinidad o el geográfico; eso hace viable la actuación de los componentes del Grupo pequeño. La atmósfera de evangelismo ocurrirá toda vez que los miembros de la iglesia trabajen juntos por el prójimo.

Sugerencias de proyectos

• Entregarfrutas,panintegralojugoen la vecindad.
• Visitar zonas de caminata, de ejercicio, etc.) y ofrecer vasos con agua.
• Visitarloshospitales.
• Entregar vestimenta para mujeres embarazadas.
• Envío de mensajes telefónicos a los amigos del barrio.
• Distribuir abrazos y literatura en lugares de mucho movimiento de personas.
• Narrarhistoriasaniñoscarenciados.
• Donar alimentos para familias en necesidad y para gente en situación de calle.
• Lavarautosdemaneragratuita.
• Visitarcárceles.
• Visitarasilosuorfanatos.
• Recaudar y distribuir juguetes para niños necesitados.
• Distribuir limonada helada o té caliente en estaciones de ómnibus o de subterráneo, según las condiciones climáticas.