Mayordomos Fieles – La Negligencia es un Robo. «Vengan en ayuda del Señor todos los que temen a Dios, y muéstrense como fieles mayordomos. La verdad debe ir a todas partes del mundo. Se me ha mostrado que muchos en nuestras iglesias están robando a Dios en los diezmos y las ofrendas. Dios ejecutará sobre ellos aquello que él ha declarado. A los obedientes, les dará ricas bendiciones; a los transgresores, una maldición. Todo hombre que lleva el mensaje de la verdad a nuestras iglesias debe cumplir su deber amonestando, educando, reprendiendo. Cualquier descuido del deber que es un robo a Dios significa una maldición para el delincuente» (Testimonios para los Ministros, pág. 312).
Fidelidad en los Diezmos. «Este no es el pedido de un hombre; es uno de los mandatos de Dios, por el cual su obra puede ser sostenida y llevada adelante en el mundo. Dios nos ayude a arrepentirnos. ‘Tornaos a mí, -dice él-, y yo me tornaré a vosotros’. Hombres que tienen el deseo de cumplir con su deber, tienen ese deber presentado con toda claridad en este capítulo. (www.sullivansusa.net) Nadie puede excusarse de pagar su diezmo y sus ofrendas al Señor» (Testimonios para los Ministros, Págs. 312, 313).
Las Finanzas Deben ser Atendidas por Hombres de Negocio. «Es un gran error emplear en asuntos de negocios a un pastor dotado de poder para predicar el Evangelio. No se deben colocar demasiadas responsabilidades sobre los que predican la Palabra de Vida. Ellos deben poder dedicar tiempo a estudiar la Palabra y examinarse a sí mismos. Al escudriñar su propio corazón y entregarse al Señor, aprenderán mejor a entender los misterios de Dios …
Las finanzas de la causa deben ser manejadas por negociantes de habilidad; pero predicadores y evangelistas han sido apartados para otros ramos de la obra. El manejo de los asuntos financieros debe colocarse sobre otros que no han sido apartados para el Evangelio …
Los encargados se han equivocado a veces al permitir que se nombre a personas que no tienen tacto y habilidad financiera para manejar los intereses financieros de importancia. La actitud de un hombre para una posición no lo califica automáticamente para otra posición. La experiencia es de gran valor.
El Señor desea tener en su obra hombres de inteligencia, hombres calificados para llevar responsabilidades de confianza en nuestras asociaciones e instituciones. Se necesitan especialmente financistas consagrados que lleven los principios de la verdad en toda transacción de negocios.
Los encargados de las finanzas no deben asumir otros cargos, cargos que son incapaces de llevar; tampoco la administración debe ser colocada en los hombros de personas incompetentes» Review and Herald, Oct. 5, 1905.
Los Recursos Deben Emplearse con Sabiduría. «Los hombres en posiciones de confianza deben considerar que los medios que pasan por sus manos son los fondos de Dios, y que los deben emplear en forma económica. Cuando haya abundancia en la tesorería, no se deben invertir en la construcción de edificios en lugares donde ya existen memoriales a Dios. Centenares de otros lugares necesitan ese dinero para que ellos también tengan algo establecido que represente la verdad. Debemos trabajar en todos los lugares de la viña del Señor. El poder de emplear y desembolsar los fondos del Señor no se debe dejar al juicio de un solo hombre» (Medical Ministry, págs. 164, 165).