Profecía en la práctica

Al igual que otros colegas, también conduzco una clase bíblica en la iglesia a la que asisto. Lógicamente, ese compromiso depende de mi itinerario. Cierto día, el tema de estudio era Daniel capítulo 2; una profecía acerca de la cual he predicado muchas veces y que también ya era conocida por la mayoría de los asistentes a la clase.

En el intento por mostrar alguna novedad, me propuse hacer una exégesis práctica de esa profecía. El resultado fue positivo. Sugiero que, al ser invitado a presentarla, imagine algo creativo. Y Dios revelará preciosas lecciones. A continuación, aparece un resumen de lo que elaboré:

Daniel 2:1: Permanezca atento en los momentos de insomnio. Dios puede captar su mente e imprimir un mensaje especial en esa ocasión.

Versículo 2: Las personas desesperadas buscarán cualquier cosa, hasta a los charlatanes, para solucionar sus problemas.

Versículo 5: El pueblo se volverá contra quien lo engañe. Nunca subestime la ira de alguien que se sintió herido.

Versículos 12 y 13: Las personas buenas pueden ser afectadas por las consecuencias de los errores cometidos por individuos rebeldes.

Versículos 17 y 18: Los grupos pequeños son poderosos. Cuando Daniel y sus amigos oraron, el Cielo se movió.

Versículos 19 y 20: Dios no actúa sin revelar sus secretos a los profetas.

Versículos 21 al 23: Dios está en el control. Establece y destrona reyes. Nunca dude de su poder para obrar en todas las circunstancias.

Versículo 24: Los creyentes justos pueden beneficiar a los malos. Al igual que Dios habría librado a Sodoma tan solo si en ella se hubiesen encontrado algunos justos, la vida de los adivinos babilónicos fue salvada por causa de Daniel y de sus amigos.

Versículo 25: Algunos incrédulos pueden actuar con sabiduría. Arios actuó rápidamente a fin de resolver el problema del decreto de muerte.

Versículo 26: No se deje intimidar por los “escépticos”. Nabucodonosor difícilmente creería que un novato tendría una respuesta que los “sabios” no tuvieran. Descubrió que las respuestas sabias pueden provenir de fuentes inesperadas.

Versículos 28 al 30: No se acredite la sabiduría que pertenece a otro. Daniel inmediatamente dio el crédito al Dios de los cielos por la autoría de toda verdad.

Versículos 31 al 35: La comunicación clara produce convicción en los oyentes. El Rey quedó tan admirado por la verdad presentada que nadie dudó de su aplicación.

Versículos 37 y 38: Comience siempre con buenas noticias. ¿Qué rey despótico podría resistir a la apelación de las siguientes palabras: “Tú eres aquella cabeza de oro”?

Versículos 37 y 38: Además, coloque todo en la perspectiva correcta: “Él los ha entregado en tu mano, y te ha dado el dominio sobre todo”.

Versículo 39: Vigile su retaguardia; puede caer en manos de una fuerza inferior. Algunas veces, los cielos usan poderes menores para cumplir sus designios.

Versículo 39: La historia muestra la realidad de la involución. La humanidad evolucionó para peor, no para mejor. Al igual que la plata es inferior al oro, el bronce a la plata y el hierro al bronce, el orden natural del mundo pecaminoso es hacia la progresiva degeneración.

Versículos 40 al 42: El abordaje historicista de interpretación de la profecía bíblica ha sido validado por el testimonio de la historia. Así, la Palabra de Dios es confiable con respecto a las profecías todavía no cumplidas.

Versículo 43: El hierro y el barro no se mezclan. La fuerza del hierro queda comprometida por la fragilidad de la arcilla. Los esfuerzos humanos por forjar poderío a partir de elementos frágiles siempre fracasan.

Versículo 44: El establecimiento de reinos pertenece a Dios. Nabucodonosor y los imperios sucesores descubrieron que Dios está implantando su Reino: primero el de la gracia; después, el Reino de la gloria, “en los días de estos reyes”.

Versículo 45: Vivimos en los últimos días de la historia humana. Los grandes escenarios proféticos movieron los cuatro reinos, llevándonos hasta los pies de la estatua –parte de hierro y parte de barro–, que en breve pasarán.

Versículo 45: “El sueño es verdadero, y fiel su interpretación”. Sin la ayuda de manos humanas, Dios establecerá su Reino de gloria: eterno, inmutable. El cumplimiento es tan cierto y seguro como el sueño original.

Versículo 46: Los proclamadores de la verdad serán exaltados. En un mundo lleno de engaños y falsedad, aquellos que testifican de la verdad recibirán la eterna recompensa.

Versículo 47: Termine con buenas noticias. Los mensajes proféticos producen conversiones. La comprensión de la verdad de Dios desarrolla confianza en sus promesas. Anuncie que el Dios que mueve la historia todavía está en su Trono. Conforme a sus planes, sus promesas y sus seguras providencias, su regreso es tan cierto como el alba.