Tecnología Digital y Vida Cristiana

Tecnología digital y vida cristiana

Elias Brasil de Souza

Este ensayo ofrece algunos puntos de vista sobre la tecnología digital y sostiene que deberíamos vivr nuestra vida digital bajo el mandato de Jesucristo. La tecnología digital hace la vida más cómoda y agradable en muchos sentidos. Internet, nuestros dispositivos como computadoras de escritorio, portátiles, tabletas, teléfonos inteligentes, etc., nos conecta fácilmente con otra persona y nos da acceso a la información en todas partes. Solamente Facebook, tiene 1.400 millones de usuarios. 1 Si fuera un país, 2 sería el más grande del mundo. De hecho, la era digital nos trajo muchos privilegios; genera una gran cantidad de información fácilmente accesible, interconecta a las personas de formas nunca soñadas en el pasado, y nos ayuda a realizar muchas tareas de forma muy fácil. En muchos sentidos es un privilegio vivir en esta era digital, y disfrutar de los beneficios que aporta a todos los ámbitos de nuestra vida. Sin embargo, viene con un precio alto porque la combinación de dispositivos sofisticados con tentáculos siempre en expansión de la World Wide Web, nos está transformando a nosotros, a nuestro mundo y a nuestras relaciones. De esta manera, deseamos reflexionar sobre las formas de disfrutar las bendiciones de la época sin ser perjudicados por ello. Este breve artículo ofrece reflexiones sobre algunos aspectos teológicos, ﬁlosóﬁcos y éticos de la tecnología, y concluye con algunas sugerencias prácticas sobre cómo controlar nuestras vidas superrelacionadas de manera que honren a Dios.

Reﬂexiones teológicas sobre la tecnología digital

El término tecnología designa “los instrumentos que creamos para actualizar el mundo ya creado ” 3 y así facilitar nuestra vida bajo el sol. Como tal, la tecnología surgió de la creatividad dada por Dios, y no debe considerarse como un mal en sí mismo. Creados a imagen de Dios, somos capaces de modelar el mundo de formas que no son posibles para otras criaturas. De esta manera desde el jardín del

Edén, los seres humanos han se dedicaron a inventar artilugios para hacer la vida más cómoda agradable y eficiente. Todo comenzó cuando Dios puso a Adán «en el jardín del Edén para cuidarlo y cultivarlo ”(Génesis 2:15). Pero antes de la creación de Adán, la Escritura admite que «no había hombre para cultivar la tierra ”(Génesis 5). El acto de cultivar el suelo, implica el uso de herramientas, y en consecuencia, la tecnología surge como una actividad necesaria y positiva. Por lo tanto, «Adán debería tomar el mundo ‘natural’ (que Dios hizo), e ir formándolo en otra cosa, algo que no era completamente ‘natural’ – pero sancionado por Dios «. 4 La tecnología parece ayudar a los humanos a cumplir mejor la misión de cuidar la tierra y cuidar la creación.

Posteriormente, la entrada del pecado distorsionó no solo la creación, sino que contaminó los productos artísticos y tecnológicos de la creatividad humana. En consecuencia, la tecnología se ha convertido algo ambivalente, y que se puede usar de una manera que “no solo expanda el potencial para hacer el bien, sino también para hacer el mal «. 5 La tecnología puede servir para arar la tierra, para sustentar la vida, o se puede convertir en un arma para destruir la vida. Ella puede bendecir a los humanos con dispositivos para salvar vidas, como puede atestiguar la medicina moderna, pero también puede producir bombas nucleares para traer destrucción y muerte. Sin embargo, a pesar de sus riesgos y peligros, la tecnología es un producto de la creatividad humana, que es un aspecto de la imagen de Dios. Y el hecho de que el primer desarrollo tecnológico descrito en la Biblia ocurre entre los descendientes de Caín (Génesis 4: 17-22) no invalida la legitimidad de la tecnología. Como muestra la Biblia, la tecnología, en forma de altares, planchas, incensarios, cuencos, jarras, lazos, candelabros, etc. – era tanto una parte de las actividades del santuario / templo como eran servicios rituales (Éxodo 25:29; 1 Crónicas 28: 11-21).

En sus actividades seculares, los israelitas no se abstenían de utilizar tecnología; fueron a los ﬁlisteos para aﬁlar sus herramientas ya que estos poseían la habilidad técnica de Tiro, quien era “un hábil artesano del bronce” (1 Reyes 7: 14). Los apóstoles y otros cristianos primitivos aprovecharon los desarrollos tecnológicos más recientes adoptando el códice, que era la última tecnología de escritura, para registrar, preservar y comunicar la Palabra de Dios. 6 Y no está fuera de lugar decir que la iglesia apostólica siempre ha estado lista para usar la tecnología más eficaz para realizar la obra de Dios.

Notablemente, algunas profecías escatológicas del Antiguo Testamento conciben la era mesiánica como un período en el que la tecnología juega un papel importante. Instrumentos inventados para destruir la vida se convierten en herramientas agrícolas para conservar la vida (Isa. 2: 4; 60:17, 18; Mal. 4: 3). Y en la profecía ﬁnal de las Escrituras, una ciudad, un símbolo supremo de los logros tecnológicos de los seres humanos, se convierte en la morada de Dios y del Cordero. Las calles de oro y las piedras preciosas también son símbolos de la creatividad tecnológica (Apoc. 22: 1–22: 5).

Por lo tanto, la tecnología no debe ignorarse, evitarse o rechazarse por motivos bíblicos; sino que debe adoptarse con cautela, como lo ha hecho el pueblo de Dios a lo largo de la historia.

Pensamientos ﬁlosóﬁcos sobre la tecnología digital

Según algunos teóricos, la tecnología se puede dividir aproximadamente en cuatro categorías:

(1) los que complementan o amplían nuestras capacidades innatas: el arado, la aguja y el automóvil; (dos) los que amplían los límites o la sensibilidad de nuestros sentidos: el microscopio, el ampliﬁcador; (3) aquellos que remodelan la naturaleza para servir mejor a nuestras necesidades o deseos: el reservorio, central hidroeléctrica; y (4) aquellos que prolongan o apoyan nuestras facultades mentales, es decir, instrumentos técnicos utilizados para recopilar información, articular ideas, compartir conocimientos, realizar cálculos y ampliar la capacidad de nuestra memoria, como libros, periódicos y computadoras. 7

En cuanto a su relación y efectos sobre los humanos, la tecnología se puede abordar desde dos perspectivas ﬁlosóﬁcas principales: instrumentalismo y determinismo. Instrumentalismo sostiene que un artefacto técnico es solo una herramienta neutral bajo el control de su usuario. Desde este punto de vista, nuestros dispositivos son simplemente instrumentos en nuestras manos y, por lo tanto, están sujetos al uso que hacemos de ellos. 8 Por otro lado, el determinismo aﬁrma que esta tecnología no es de ninguna manera neutral, sino que moldea a sus usuarios y los induce a alcanzar algunos objetivos predeterminados. Con frecuencia, podemos encontrar la verdad en algún punto intermedio. Aunque un punto de vista instrumental de la tecnología puede parecer más intuitiva y evidente por sí misma, no debemos olvidar el hecho de que la tecnología y la tecnología digital para este material, trae consigo algunos valores inherentes. Como varios de los teóricos de la comunicación han advertido, la tecnología conserva algunos valores planeados por sus creadores. 9 Marshall McLuhan advierte, «el agente es el mensaje», 10 idea repetidos por otros teóricos de los medios. 11 Se ha observado ampliamente que los recursos tecnológicos que han llegado a existencia durante las últimas décadas, ahora están reconfigurando nuestros cerebros. 12

Ahora es claro que el dispositivo tecnológico viene con valores predeterminados. Como aﬁrma un teórico: “Cada herramienta incorpora una tendencia ideológica, una predisposición a construir el mundo como una cosa u otra, a valorar algo sobre el otro, para expandir un sentido o habilidad más fuerte que el otro «. 13 El autor continúa: “Las nuevas tecnologías cambian la estructura de nuestros intereses: las cosas sobre las que pensamos. Alteran la naturaleza de nuestros símbolos: las cosas en las que pensamos «. 14 Por ejemplo, los teléfonos celulares eran dispositivos para conectar a los gerentes con sus empleados. Cuando los teléfonos móviles se popularizaron, convirtieron a muchos usuarios en «administradores», incluso durante una cena familiar o un servicio de adoración. También parece evidente que cada tecnología, no solo trae beneﬁcios, sino que también problemas, y resolverlos requiere tecnologías aún más avanzadas.

Como Freud satirizó hace mucho tiempo: “Si no hubiera habido un ferrocarril, mi hijo nunca habría abandonado su pequeña ciudad natal y yo no necesitaría un teléfono para escuchar su voz; Si no se hubieran adoptado los viajes en barco para cruzar el océano, mi amigo no habría no habría viajado por mar, y no necesitaría un cable submarino para aliviar mi ansiedad de tener noticias de él «. 15 Al considerar los beneﬁcios y las cargas de los dispositivos tecnológicos, es difícil estar en desacuerdo con Freud. Cada nueva tecnología parece traer algunos beneﬁcios que, sin embargo, van acompañados de algunos problemas que a su vez requiere nueva tecnología para contener sus efectos indeseables. Por ejemplo, la tecnología ha liberado cada vez más a los seres humanos del trabajo físico, y en consecuencia hace que otra tecnología, la cinta de correr, sea necesaria para mitigar los efectos de un estilo de vida sedentario. Pero la buena noticia es que el aspecto negativo de nuestros dispositivos digitales se puede mitigar y por lo tanto, pueden usarse de manera que honren a Dios. En las reﬂexiones que siguen, trato de sugerir algunos principios para ayudarnos a controlar nuestra vida con hiper-relacional.

Pensamientos éticos sobre la tecnología digital

Según un autor, la percepción de la tecnología que tiene una sociedad en general, se divide en tres categorías: primero, «todo lo que ya está en el mundo cuando naces es perfectamente normal». Segundo, «todo lo que se inventa ahora y antes de los treinta es increíblemente emocionante y creativo y con un poco de suerte puedes alejarte rápidamente de él «. Tercero, «cualquier cosa que sea inventada después de los treinta años va en contra del orden natural de las cosas e inicia el ﬁn de la civilización tal como lo conocemos, hasta hace unos diez años cuando gradualmente dejó de ser realmente correcto. » 16 Para cualquier grupo de edad al que pertenezca alguien, es cada vez más difícil vivir sin una conexión con Internet o dispositivos móviles. Privarse de un teléfono móvil puede generar ansiedad. Nueve de diez personas menores de treinta años admiten sufrir de «nomofobia», el miedo a no tener teléfono móvil. 17 Dado el papel importante que juegan los dispositivos digitales e Internet en nuestra cultura, no podemos separar nuestra vida espiritual de nuestra vida hiper-relacionada. La forma en que vivimos nuestra vida digital tiene implicaciones para nuestra vida personal, 18 y, en consecuencia, para nuestra relación con Jesús. A continuación, observamos que algunos beneﬁcios de la vida digital conllevan desafíos éticos que necesitan una atención cuidadosa. Para honrar a Jesús con nuestra experiencia digital, puede ser útil reﬂexionar cómo la efectividad, accesibilidad, información, conectividad, responsabilidad, privacidad, culto y sabiduría actúan sobre la experiencia digital de alguien.

Eﬁciencia

La tecnología digital ahorra tiempo cuando se puede organizar de forma rápida y realizar tareas de manera eﬁciente y brindar acceso a una gran cantidad de información. Sin embargo, ella a menudo puede ser una pérdida de tiempo. Lo que comienza como una búsqueda digital dirigida, puede distraerlo muy fácilmente, un cambio trivial de un enlace a otro, mirando las redes sociales o respondiendo mensajes. De esta forma, la principal ventaja de la tecnología digital puede dejarse de lado por las tentaciones inherentes a los propios medios.

Dedicar tiempo a trivialidades en vez de dedicar tiempo al estudio de la Biblia, reﬂexión y su vida devocional es el principal desafío en la era digital; es una cuestión de mayordomía que necesita una consideración seria. Entonces, cuando usamos nuestros dispositivos digitales, debemos ser conscientes de que la gestión del tiempo puede ser un gran desafío que superar. Nunca antes había sido tan inspirado un consejo pertinente como ahora: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos ” (Efesios 5:15, 16).

Accesibilidad

Muchas aplicaciones, sitios web y otro software brindan acceso a la Palabra de Dios en todas partes y circunstancias. Hay tantos que en la iglesia, muchos adoradores preﬁeren leer la Biblia en su dispositivos en lugar de en un volumen impreso. Sin embargo, nuestros dispositivos digitales también suelen contener una gran cantidad de aplicaciones distintas de la Biblia y, en algunos casos, incluso conexión con Internet. En consecuencia, la tentación en la iglesia de navegar por la web, leer correos electrónicos y participar en los medios de comunicación puede dominar al adorador. Los antiguos israelitas enfrentaron la constante tentación de cambiar el culto al Dios verdadero por los rituales paganos realizados en lugares altos y bajo árboles sagrados. Tentaciones similares asaltan a muchos ﬁeles hoy en día como «iDioses«19 que los alejan de la adoración verdadera. Sin embargo, el primer mandamiento nos recuerda: «No tendrás dioses ajenos delante de mí» (Ex. 20:3).

Información

Uno de los principales beneﬁcios de la tecnología digital es el acceso rápido a los datos y la información. Pero, a esta gran cantidad de datos e información generalmente se accede de un vistazo, y muy probablemente ya no sea algo tan valioso. Estas miradas rápidas tienden a comprometer la capacidad de la persona de pensar profundamente y concentrarse en una idea específica.20 Como explica un autor cristiano: Las personas que pasan largas horas leyendo libros con ideas complejas tienden a hacerse buenas en esta actividad. Asimismo, las personas que pasan sus días consumiendo pequeños trozos de información como los mensajes de texto o la posición actualizada tienden a tener mentes particularmente adaptada para llevar a cabo estas tareas. Pero lo difícil que es dominar las carreras de larga distancia y levantar pesas con las piernas, estas dos tareas son mutuamente excluyentes hasta cierto punto. 21 Investigaciones recientes muestran que debido a la tecnología digital, la poca capacidad de atención ha disminuido su promedio de doce segundos en el año 2000 a solo 8 segundos en la actualidad (más bajo que el de un pez de pecera, cuyo promedio es de nueve segundos). 22 Como consecuencia Además, se tiende a descuidar la memorización de la Biblia, ya que cualquier pasaje se puede encontrar rápidamente en un dispositivo digital. Conscientes de tales riesgos, debemos esforzarnos por profundizar nuestro pensamiento, reﬂexión y meditación para manejar la palabra de Dios con responsabilidad. El pensamiento superﬁcial conduce inevitablemente a la vida superﬁcial. 23 Cuando navegamos en nuestros dispositivos digitales siempre debemos tener en cuenta lo que el Señor le dijo a Josué: “Este Libro de la Ley no Saldrá de tu boca, pero meditarás en él día y noche, así que ten cuidado de hacerlo en consecuencia. “Porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien” (Josué 1: 8).

Conectividad

La tecnología digital nos permite conectarnos con otras personas, establecer relaciones, formando amistades y comunidades que de otra manera no serían posibles. La vida de la iglesia también se beneﬁció de los medios digitales, trascendiendo las barreras geográﬁcas al difundir el mensaje del evangelio y brindando servicios de adoración para muchos que de otro modo se verían privados de tales experiencias. Desafortunadamente, algunas personas optan por una experiencia de adoración despersonalizada en frente a una computadora en lugar de asistir físicamente a la iglesia para disfrutar de la presencia física de otros creyentes. Estos adoradores pierden el privilegio de experimentar la presencia física de otros creyentes y todas las responsabilidades que emanan de una auténtica comunidad eclesial. Adoración intermedia o virtual, aunque aceptable en circunstancias atenuantes, nunca puede reemplazar adecuadamente las bendiciones que se reciben cuando estamos presencialmente. Fuimos creados para las relaciones cara a cara y la interacción sin mediación, con Dios y nuestros compañeros humanos. Curiosamente, aunque el apóstol Juan a menudo usando tecnología de escritura para comunicarse con la iglesia, reconoció que la reunión cara a cara era mucho mejor: “Tengo muchas cosas que escribiros, pero no he querido hacerlo por medio de papel y tinta, pues espero ir a vosotros y hablar cara a cara, para que nuestro gozo sea cumplido”(2 Juan 12). Al enfatizar el valor máximo del encuentro cara a cara, la Biblia dice que un día veremos a Dios cara a cara (Mat. 5: 8; 1 Cor. 13:12; 1 Juan 3: 2). Y el libro de Apocalipsis concluye declarando que en la Nueva Jerusalén, los redimidos verán el rostro de Dios (Apoc. 22: 4).

Privacidad

También debemos tener en cuenta que cuando estamos navegando por Internet siempre dejamos huellas digitales que muestran nuestras compras, encuestas, fotografías, clics, intereses y más. Nuestra herramienta de investigación sabe mucho más sobre nosotros que nuestro cónyuge, pastor o psicólogo. Si nuestra investigación indica lo que hay dentro de nuestro corazón, nuestros dispositivos dirían donde hemos estado. Un autor cristiano describe esto de la siguiente manera: Pasé unos minutos leyendo los titulares de un sitio de noticias. Busqué el último blog de artículos recopilados por mi lector de RSS y me detuve en Facebook para ver cómo estaban mis amigos. Incluso en estas pocas actividades inocuas, dejé un rastro de mis datos. Mi proveedor de telefonía celular me rastreó cuando caminaba de casa al comedor, e incluso ahora puede ver mi ubicación a unos pocos metros, ciertamente una lectura lo suﬁcientemente precisa para saber que estoy en este ediﬁcio. Hace unos minutos, mi iPhone me envió una información de ubicación de Apple de las ultimas doce horas basado en GPS, conexiones Wi-Fi y torres de telefonía celular. El Facebook, sabe la dirección de Internet que visité, sabe qué tipo de computadora estoy usando, sabe cada una de las ayudas que me mostró, y sabe que no hice clic en ninguna de ellas. Google sabe qué blogs miré esta mañana y sabe que hice una búsqueda o dos en el camino. Mi tarjeta de crédito sabe dónde estoy, o al menos ellos sabían dónde estaba hace 15 minutos, ya que ahora tienen un registro de la compra que hice (un sándwich de huevo frito increíblemente bueno, debes saberlo). Una cámara de video de seguridad en el banco al lado de la puerta registró algunos de mis pasos cuando deposité un comprobante en el instante en que fui al cajero. Todos estos datos se registraron en algún lugar – en muchos lugares, de hecho. Y es probable que estos datos permanezcan allí para siempre. Será la excepción más que la regla si los datos se borran alguna vez. 24

De esta forma, aunque tengamos la impresión de que lo que hicimos online es privado, nuestras vidas están hoy más expuestas al público que nunca. Con tanta visibilidad podemos traer honor o vergüenza al nombre de Dios. Entonces, cuando usamos esta herramienta tan útil, a pesar de arriesgado, como Internet, debemos tener en cuenta el consejo de Pablo: “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”(Rom. 12: 2).

Adoración

Otro problema que merece consideración se reﬁere al creciente uso de Biblias digitales en la iglesia, principalmente por jóvenes, los llamados “nativos digitales” 25 Los miembros tradicionales de la iglesia pueden llegar a sentirse incómodos con esta situación. Después de todo, llevar una Biblia impresa personal a la iglesia transmite la imagen de un cristiano ﬁel. Sin embargo, una mirada más cercana a algunos Los acontecimientos históricos advierten contra cualquier posición dogmática. En este sentido, conviene recordar que desde la época de Moisés hasta la Reforma, los creyentes individuales rara vez tenían una copia personal de la Biblia. Se encontraban con la Palabra de Dios cuando se reunían para adorar en el templo, sinagogas e iglesias establecidas. Las copias escritas a mano eran tan caras que solo sacerdotes, rabinos y otros líderes religiosos tenían este lujo, y esto también para uso de la comunidad. Con la popularidad de la imprenta, las familias podían comprar una copia de las Escrituras. Pero fue solo en el siglo XX que las personas pudieron tener una copia de la Biblia y, en consecuencia, llevarla a la iglesia. 26 No hay bases históricas o teológicas para rechazar un medio en favor del otro. Puede ser discutido que una copia impresa de la Biblia puede tener un poder simbólico más fuerte porque el agente refuerza el mensaje. Una Biblia digital, por otro lado, generalmente tiene que competir con otras aplicaciones desde el mismo dispositivo. Aquellos que optan por una Biblia digital son más propensos a las distracciones, como ya fue mencionado. A pesar de estas consideraciones, no debemos restringir la Biblia a un instrumento especíﬁco. Sobre todo, debemos centrarnos en animar a nuestros jóvenes a estudiar la Biblia, ya sea o impresa. Después de todo, ya sea que esté consagrado en un manuscrito, en un volumen impresa, o en una aplicación digital, «la palabra de Dios es viva y eﬁcaz, y más aﬁlada que cualquier espada de doble ﬁlo; penetra hasta el punto de dividir alma y espíritu, coyunturas y tuétano, y juzga pensamientos e intenciones del corazón” (Hebreos 4:12).

Sabiduría

Como la tecnología de comunicación más fascinante y revolucionaria, Internet es una combinación de libro, radio, fotografías, telégrafo, televisión, teléfono, etc. Acceso a tecnología tan poderosa de nuestros dispositivos digitales crea una sensación de poder irrestricto sobre cualquier tipo de información que nos pueda interesar o que nos interese. Y a diferencia de muchas tecnologías anteriores, el Internet es un camino de dos vías. Su usuario también puede replicar, responder y publicar contenido sin necesidad de una evaluación cuidadosa. En consecuencia, como reconoce un erudito, “Desestabiliza enormemente las estructuras de conocimiento establecidas por siglos de imprenta (dirección editorial, revisiones cuidadosas, aprobación gubernamental o eclesiástica, etc.) «. 27 Para navegar por un mar de información tan grande, se debe hacer una distinción entre la verdad y el error de formas no previstas por tecnologías anteriores. 28 Es instructivo saber que tales herramientas de investigación, por ejemplo, miden la verdad por relevancia, y los wikis miden la verdad por consenso. El problema es crítico, como un autor cristiano observa: no se trata de si Wikipedia es buena o mala o si esas herramientas de investigación son buenas o malas. La pregunta es, en realidad, si nuestras tecnologías están cambiando nuestra propia concepción de verdad. Esto también sucedió con el surgimiento de la fotografía. En la era de la imprenta, creemos en lo que leemos. Pero en la era de la fotografía, la era de las imágenes, hemos llegado al punto de decidir que una imagen vale más que 1000 palabras, que las imágenes tienen más peso y autoridad en la arena de la verdad. De todos modos, empezamos a creer lo que vemos en lugar de lo que leemos. En algún lugar del camino la imagen cambió la forma en que entendemos la verdad. 29 Esto cambia, de manera fundamental, la concepción de la verdad y lo que constituye la autoridad. El mismo autor advierte que como “cristianos, sabemos que esta avenida no es más que el ﬁnal mortal. El conocimiento y la verdad no se pueden democratizar; proceden de Dios, que es la verdad. Cuando creamos y usamos tecnologías digitales como wikis y herramientas de investigación para acceder a la información debemos protegernos del peligro de seguirlos para recrearnos a su propia imagen”. 30 Así, para comprender mejor la utilidad y los límites de Internet, dispositivos y tecnologías que lo acompañan, podemos aplicar un modelo que organiza el contenido de la mente en cinco categorías: datos (símbolos), información (datos procesados que responden a preguntas, quién, qué y cuándo), conocimiento (aplicación de datos para responder a la pregunta «cómo»), comprensión (apreciación del «por qué») y sabiduría (evaluación de la comprensión). 31 La tecnología puede ser útil al intentar adquirir las dos o tres primeras categorías. Pero ninguna tecnología puede reemplazar la mente humana cuando se trata de comprensión y sabiduría. Hoy en día la gente tiende a confundir datos, información y conocimiento con comprensión y sabiduría. Para lidiar con una amplia cantidad de datos y conocimientos y transformarlos en comprensión y sabiduría, tenemos que hacer uso adecuado de nuestras facultades intelectuales. Ninguna máquina puede reemplazar nuestro cerebro cuando separamos lo bueno de lo malo y transformamos el conocimiento en entendimiento y sabiduría para navegar en la vida real. Pero últimamente, con una cantidad tan abrumadora de datos e información a los que tenemos libre acceso, siempre debemos recordar este axioma de sabiduría: “El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.” (Pro. 9:10).

Conclusión

La ﬁdelidad a Dios no requiere ignorancia, miedo o rechazo a la tecnología digital. En verdad, deberíamos estar agradecidos de vivir en una época en la que la tecnología digital genera conocimiento disponible como nunca antes, nos permite realizar tareas, y nos mantiene conectados con las personas que amamos. Es nuestra responsabilidad vivir nuestra vida digital de manera que honre a Dios, mostrar amor y respeto por nuestro prójimo y cuidar el mundo creado. Por tanto, un uso religioso de dispositivos digitales es algo que honra a Dios con la administración ﬁel de nuestros recursos digitales. Para concluir, ofrezco algunas sugerencias prácticas sobre cómo honrar a Dios con nuestros dispositivos de tecnología: (1) Cuando toma su teléfono inteligente u otro dispositivo digital cada mañana,

Primero abra su aplicación de la Biblia y comience su día digital con una lectura de la Biblia. (2) Durante el día, tan a menudo como sea posible, abra la aplicación de la Biblia en su teléfono inteligente o tableta y medite en un pasaje de la Escritura. Dado que un teléfono celular te hace estar siempre disponible para otros, ¿por qué no permitir que Dios los alcance a través de su Palabra? (3) Dar prioridad a una presencia consiente por encima de la atención que le da a su teléfono inteligente. En otras palabras, no interrumpa la conversación ni interacción cara a cara para contestar su teléfono celular o consultar el correo electrónico (a menos que haya circunstancias mitigantes). (4) Durante las comidas, el culto familiar y otras interacciones personales, deje de lado sus dispositivos para disfrutar mejor de la presencia física de sus seres queridos.

Puede proponer mejores ideas y formas de lograr este objetivo propuesto. La regla fundamental es esta: sea el dueño de su tecnología, nunca el siervo. Controla tus dispositivos tecnológicos y vive tu vida online de manera que honre a Dios. Finalmente, como principio fundamental para orientarnos cuando manejamos nuestra tecnología digital, el consejo antiguo, pero que siempre podemos seguir aplicando permanece: “Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.”(1 Cor.10:31).

Elias Brasil de Souza es director del Instituto de Investigaciones Bíblicas

1 O Portal de Estatísticas, acessado em 21 de Junho de 2015, http://www.statista.com/statistics/272014/global-social-networks-ranked-bynumber-of-users/

2 Devo esta analogia a Jonathan Morrow, Think Christianly: Looking at the Intersection of Faith and Culture (Grand Rapids, MI: Zondervan, 2011), 188.

3 Ignacio L. Götz, Technology and the Spirit (Westport, CT: Praeger, 2001), 22.

4 John Dyer, From the Garden to the City: The Redeeming and Corrupting Power of Technology (Grand Rapids, MI: Kregel Publications, 2011), Kindle location 742-743.

5 Derek C. Schuurman, Shaping a Digital World: Faith, Culture and Computer Technology (Westmont, IL: InterVarsity Press, 2013), Vyrso edição digital .

6 Veja Graham N. Stanton, Jesus and Gospel (Cambridge: Cambridge University Press, 2004), 165–191.

7 Nicholas G. Carr, The Shallows: What the Internet is Doing to Our Brains (New York: W. W. Norton, 2011), 78–79, iBook.

8 James W. Carey, Communication as Culture: Essays on Media and Society, ed. rev. (New York: Routledge, 2009), 107.

9 Charles Adams, “Automobiles, Computers, and Assault Rifles: The Value-Ladenness of Technology and the Engineering Curriculum,” Pro Rege 19, no. 3 (1991): 1–7.

10 Marshall McLuhan, Understanding Media: The Extensions of Man (Cambridge, MA.: MIT Press, 1994), 7.

11 Veja, e.g., Neil Postman, Technopoly: The Surrender of Culture to Technology (New York: Vintage Books, 1993), 133; Juval Portugali, Complexity, Cognition and the City (Heidelberg: Springer, 2011), 100.

12 Veja Carr, chapter 6: “The Juggler’s Brain.” Archibald D. Hart and Sylvia Hart Frejd, The Digital Invasion: How Technology is Shaping You and Your Relationships (Grand Rapids, MI: Baker, 2013), Vyrso edição digital (veja especialmente capítulo 3, “The Rewiring of Our Brains”).

13 Postman, 13.

14 Ibid., 20.

15 Sigmund Freud, Civilization and Its Discontents (New York: W. W. Norton, 1962), 35.

16 Douglas Adams, “How to Stop Worrying and Learn to Love the Internet” (esta parte apareceu primeiro no News Review seção do The Sunday Times, 29 de Agosto de 1999), acessado em 2 de Junho de 2015, http://www.douglasadams.com/dna/19990901-00-a.html

17 News.com.au, 2 de Junho de 2013, acessado em 30 de Maio de 2015, http://www.news.com.au/technology/nomophobia-the-fear-of-nothaving-a-mobile-phone-hits-record-numbers/story-e6frfro0-1226655033189.

18 O adjetivo “personificado” em toda parte deste artigo indica relacionamento e interações face a face. Em contraste, “despersonificado” se relaciona a experiências vividas através da mediação da tecnologia digital.

19 Veja Craig Detweiler, iGods: How Technology Shapes Our Spiritual and Social Lives (Grand Rapids, MI: Brazos Press, 2014).

20 Veja Jun Young and David Kinnaman, The Hyperlinked Life: Live with Wisdom in an Age of Information Overload (Grand Rapids, MI: Zondervan, 2014), Vyrso edição eletrônica.

21 Dyer, Kindle location 587–595.

22 http://www.medicaldaily.com/human-attention-span-shortens-8-seconds-due-digital-technology-3-ways-stay-focused-333474

23 Este ponto é bem desenvolvido por Challies.

24 Challies. 8

25 De acordo com Archibald D. Hart, Hart Frejd Sylvia, and Sylvia Hart Frejd, The Digital Invasion: How Technology Is Shaping You and Your Relationships (Grand Rapids, MI: Baker, 2013), Vyrso edição eletrônica, “O termo nativo digital descreve aqueles que nasceram depois do advento da tecnologia digital. Obviamente, eles são a geração mais jovem. Este grupo também é chamado de “Geração i” tendo nascido com o DNA digital. Em contraste, imigrantes digitais são aqueles nascidos antes do advento da tecnologia digital. Eles cresceram sem qualquer DNA digital, e têm batalhado para aprender como o mundo digital funciona. Em termos gerais nativos digitais falam e respiram a linguagem dos computadores, enquanto que os imigrantes digitais, embora sejam capazes de se adaptarem à tecnologia, não têm qualquer DNA digital para guia-los.”

26 Dyer, Kindle location 340–347.

27 Paul A., Soukup, Francis J. Buckley and David C. Robinson, “The Influence of Information Technologies on Theology,” Theological Studies 61 (2001): 373.

28 Por exemplo: “Em Março de 2007 os padrões de guias eram 24 anos mais velhos do que o homem de Kentuck Ryan Jordan. Por mais de um ano ele tinha trabalhado como um editor para a Wikipedia, fazendo mudanças e correcões em milhares de artigos e servindo como um árbitro nas disputas entre os autores. Seu esboço biográfico na Wikipedia o descrevia como um professor de religião numa universidade particular. Não parecia haver qualquer coisa fora do comum sobre seu trabalho; nenhuma bandeira vermelha nunca foi erguida. Mas depois que um usuário da Wikipedia leu um registro Nova Iorquino de Jordan em 2006 – que apenas se passava pelo pseudônimo Essjay, que a revista também usou – a verdade a respeito da identidade de Jordan começou a ser esclarecida. Ele não apenas não era um professor com especialização em teologia e lei canônica, mas também jamais recebeu um título de Doutor em Filosofia, como havia reivindicado, e frequentemente usou um livro chamado Catolicismo para Mudos como sua fonte de edição.” Frances Romero, “Editor Found to be a Fraud,” TIME (Terça-feira, 13 de Janeiro de 2011), acessado em 1 de Junho de 2015, http://content.time.com/time/specials/packages/article/0,28804,2042333_2042334_2042575,00.html

29 Challies.

30 Ibid.

31 Gene Bellinger, Durval Castro, Anthony Mills, “Data, Information, Knowledge, and Wisdom,” acessado e 1 de Junho de 2015, http://www.systems-thinking.org/dikw/dikw.htm

16 Douglas Adams, «Cómo dejar de preocuparse y aprender a amar Internet» (esta parte apareció primero en las noticias Review section of The Sunday Times, 29 de agosto de 1999), consultado el 2 de junio de 2015, http://www.douglasadams.com/dna/19990901-00-a.html

17 News.com.au, 2 de junio de 2013, consultado el 30 de mayo de 2015, http://www.news.com.au/technology/nomophobia-the-fear-of-nothaving-a-mobile-phone-hits-record- números / historia-e6frfro0-1226655033189.

18 El adjetivo «personiﬁcado» a lo largo de este artículo indica relaciones e interacciones cara a cara. En contraste, “Despersoniﬁcado” se relaciona con experiencias vividas a través de la mediación de la tecnología digital.

19 Véase Craig Detweiler, iGods: How Technology Shapes Our Spiritual and Social Lives (Grand Rapids, MI: Brazos Prensa, 2014).

20 Véase Jun Young y David Kinnaman, The Hyperlinked Life: Live with Wisdom in an Age of Information Sobrecarga (Grand Rapids, MI: Zondervan, 2014), edición electrónica Vyrso.

21 Dyer, Kindle ubicación 587–595.

22 http://www.medicaldaily.com/human-attention-span-shortens-8-seconds-due-digital-technology-3-ways-stay- enfocado-333474

23 Este punto está bien desarrollado por Challies.

24 Challies. 8

25 Según Archibald D. Hart, Hart Frejd Sylvia y Sylvia Hart Frejd, The Digital Invasion: How Technology

Is Shaping You and Your Relationships (Grand Rapids, MI: Baker, 2013), edición electrónica de Vyrso, “The native term digital describe a los nacidos después del advenimiento de la tecnología digital. Obviamente, son los más

joven. Este grupo también se llama “Generación i” por haber nacido con ADN digital. Por el contrario, los inmigrantes

digitales son aquellos que nacieron antes de la llegada de la tecnología digital. Crecieron sin ningún ADN digital y han luchando por aprender cómo funciona el mundo digital. En términos generales, los nativos digitales hablan y respiran lenguaje informático, mientras que los inmigrantes digitales, aunque son capaces de adaptarse a la

tecnología, no tienen ningún ADN digital que los guíe «.

26 Dyer, ubicación de Kindle 340–347.

27 Paul A., Soukup, Francis J. Buckley y David C. Robinson, “The Inﬂuence of Information Technologies on Teología ”, Estudios Teológicos 61 (2001): 373.

28 Por ejemplo: “En marzo de 2007, los estándares de los guías eran 24 años más viejos que el hombre de Kentuck Ryan Jordán. Durante más de un año había trabajado como editor de Wikipedia, haciendo cambios y correcciones.

en miles de artículos y sirviendo como árbitro en disputas entre autores. Su esquema biográﬁco en Wikipedia lo describió como profesor de religión en una universidad privada. No parecía haber ninguno algo inusual en tu trabajo; nunca se levantaron banderas rojas. Pero después de un usuario

de Wikipedia leyó un registro de Jordan de Nueva York en 2006, que solo se hizo pasar por el seudónimo de Essjay, que la revista también usó – la verdad sobre la identidad de Jordan comenzó a aclararse. El no solo

no fue profesor especializado en teología y derecho canónico, pero tampoco recibió un título en

Doctor en Filosofía, como había aﬁrmado, y a menudo usaba un libro llamado Catolicismo para mudos como fuente de edición «. Frances Romero, “Editor encontrado como fraude”, TIME (martes 13 de enero de 2011), consultado el 1 de junio de 2015, http://content.time.com/time/specials/packages/article/0,28804,2042333_2042334_2042575,00.html

29 Challies.

30 Ibíd.

31 Gene Bellinger, Durval Castro, Anthony Mills, «Datos, información, conocimiento y sabiduría», consultado y 1 Junio de 2015, http://www.systems-thinking.org/dikw/dikw.htm

Enlace para descargar el documento. Descargar en PDF